Si habéis pensando que había abortado la misión cupcakes estabais equivocados, no los dejaría por nada :) tan sólo he tenido que cerrar el horno por unos días, debido a que estuve de boda por Escocia y no en cualquier parte, si no que en uno de los puntos más alejados y bonitos de este país, Las Islas Orcadas.
Así es que le prometí a mi novio no hornear por esos días, seguramente no quería que en el primer encuentro con su familia me conocieran como una obsesa por los cupcakes y la repostería en general, pero creo que no le sirvió de mucho, porque en su casa aman todo lo dulce al igual que yo y además de ser todos un solete, han compartido conmigo unas cuantas recetas tradicionales, que no puedo esperar a compartirlas con ustedes.

Y una vez de regreso en Londres, llegó el gran día!!!
Sí, el día de mi curso de Wedding Cupcakes and Roses en
Fair Cake, con el que estaba tan emocionada en las últimas semanas, emoción que se hizo poca comparada con la que sentí al ver las maravillas de cupcakes que había aprendido a hacer en el Taller Vainilla una vez terminado el curso.
Ahora, vamos desde el comienzo.
No sabía mucho de esta escuela, pero me bastó con ver su web, leer la historia de su dueña Shikita, para confiar en ella al 100% y no me defraudó, porque nada más llegar al taller, sentí felicidad máxima!!! El lugar es nuevo y se ve que cada detalle ha sido creado con esmero y delicadeza. Para que decir como se me caía la baba viendo todos los hornos, todas esas kitchen aids juntas y alineadas...menos mal que en ese momento mi alucinación fue interrumpida por una chica de lo más maja ofreciéndome algo para beber y así con mi cup of tea (mi taza de té) en mano me hice con mi sitio, donde estaban todos los materiales perfectamente colocados y yo lista para empezar.

Shikhita, nuestra profesora se presentó y empezamos con el modelado de la rosa.
Ay, yo sudaba, pero una vez que tuve la rosa acabada, todos esos nervios se tornaron en satisfacción máxima y no sabéis lo bien que me sentí.
Luego continuamos con la creación de diversos tipos de flores decorativas para nuestros cupcakes.
Posteriormente pasamos a trabajar con fondant y buttercream, para cubrir nuestros cupcakes y empezar así la decoración.
Este momento fue la gloria, porque ya sólo me quedaba darle rienda suelta a la imaginación y poner las florecillas tal y como me diera la gana.
Y voilà, aquí están mis 12 cupcakes terminados!!!
A qué son monísimos!? :)
Muchas gracias a Shikhita y Jess por proporcionarme un día tan especial y obviamente por enseñarme tan cuidadosamente estas maravillosas técnicas para cupcakes.
De todo corazón os recomiendo el taller, así es que si alguien tiene la oporunidad de hacerlo, yo diría que sí a ojos cerrados!!!
Las podéis contactar en su página web www.faircake.co.uk o en Facebook.
Por último quiero agradecer a mi novio, por hacerme este menudo regalazo, es el mejor novio del mundoooooo!!!!!!!!!